martes, 26 de julio de 2011

Obsequios

Te voy a regalar el cielo
para que te alimentes
de estrellas y cometas,
para que derrames
las auroras en tus ojos.

Te voy a regalar mis manos
para que las pases por tu cuerpo,
para que las guardes
con tus lágrimas.

Te voy a regalar mi mundo
para que lo tires por la calle,
para que viajes por él
cuando te encuentres sola.

3 comentarios:

  1. ¿No será que da mucha vuelta para apoderarse de las auroras en los ojos, las lágrimas y soledad de la otra persona? ¿Será que sabe estar consigo mismo/a? ¿Porqué ese afán de obsequiar lo que no nos pertenece?

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  2. No es afán, es el desconsuelo de haberlo ofrecido y dado todo lo que se tiene (que es nada).

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  3. Amigos ambos, no sé si algún día vayan a leer estas líneas, estoy convencida de que cuando la nostalgia llega, las palabras faltan para expresar el sentimiento que hábita en nosotros y queremos regalarnos por completo como parte del universo que nos rodea.

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